A menudo usamos muchas palabras que aunque sabemos que significan, no conocemos su origen. Tanto es así que recurrimos a palabras procedentes de otras lenguas y los adaptamos a la nuestra, como es el caso del ''ok''.
Esta expresión que también se escribe y se pronuncia como ''okay/okey'', hace referencia al hecho de estar de acuerdo con algo, tanto así que se traduce como ''bien'' o ''de acuerdo'', sin embargo, aunque es utilizada con frecuencia, no está reconocida por el diccionario en español.
Tanto es su popularidad que se usa alrededor del mundo por su sencillez y singularidad, pues es una manera rápida y directa para expresar conformidad, aceptación que algo o alguien está en un buen estado.
Origen del ''okay''
Sobre su origen existen diversas teorías, pero la más sonada es que surgio en la guerra de Secesión de Estados Unidos durante los años 1861 al 1865. Al momento de que las tropas norteamericanas regresaban a su cuartel sin ninguna baja, ponían en una gran pizarra ''0K'', abreviando la frase ''ZERO KILLED'' que se traduce a cero muertos.
Como no había muertes ni pérdidas, el ''0K'' era una forma de representar que todo había salido bien, por lo que esta abreviación fue comenzando a estar presente en el habla coloquial, utilizando el ''OK'' para dar a entender que no había problema.
Sin embargo, otros apuntan que su origen se dio en 1830, cuando se puso de moda entre los jóvenes intelectuales escribir mal las palabras y abreviarlas para luego usarlas en sus conversaciones, algo similar a lo que ocurre hoy en día como el OMG o el LOL.
Es así que una de las abrevaciones populares fueron el OK (oll korrect), que provenía de la frase en ingles ''all correct'', que se traduce a todo correcto. Otras de las abreviaciones fueron OW (oll wright, all right) o KG (know go, no ir).
Sea cual sea su origen, está más que claro que es una frase o palabra que se ha hecho tan popular que cualquiera puede entender, independientemente del idioma.